En los últimos días, se ha hablado mucho sobre ciberataques en Colombia, un tema que no es nuevo en el país. Según la firma de ciberseguridad Fortinet, en el primer semestre del año, Colombia recibió 5,000 millones de intentos de ataques informáticos. Se han mencionado varios ejemplos de ciberataques en los últimos años, incluyendo a la Pontificia Universidad Javeriana, la organización multinacional Keralty y Empresas Públicas de Medellín (EPM), así como un reciente ataque a IFX Networks que afectó a varias entidades estatales, como el Ministerio de Salud y el Consejo Superior de la Judicatura.
El gobierno colombiano ha anunciado que demandará a IFX Networks por los daños causados por el ataque, argumentando que hubo fallas en la seguridad de la compañía. Esto plantea la pregunta de por qué los ciberataques generan tanta preocupación y alboroto.
Un ciberataque se puede entender como un intento no autorizado de abrir un «candado digital» en una computadora para acceder, robar o dañar información. En el caso de IFX Networks, fue un ataque de ransomware, en el cual los delincuentes cifran los archivos o sistemas informáticos de la víctima y luego exigen un rescate para desbloquearlos. Los responsables de este ataque se cree que son el colectivo Ransomhouse, quienes también estuvieron detrás del ataque a Keralty.
Para abordar estas preocupaciones y brindar recomendaciones sobre cómo proteger la información, se entrevistó a Rafael Vicente Páez, director de la Maestría en Seguridad Digital de la Pontificia Universidad Javeriana. Páez señala que la cantidad de intentos de ciberataques no necesariamente refleja la debilidad de la ciberseguridad en Colombia, ya que muchas veces estos ataques no tienen éxito. Colombia ha mejorado en ciberseguridad en los últimos años, principalmente a través de normativas y cooperación internacional.
El hecho de que los ciberataques afecten a entidades gubernamentales como el Ministerio de Salud y el Consejo Superior de la Judicatura no necesariamente indica una falta de seguridad en estas instituciones, ya que los atacantes son expertos en encontrar vulnerabilidades y aprovecharlas. Los profesionales de seguridad trabajan constantemente para protegerse contra estos ataques. En resumen, aunque Colombia enfrenta desafíos en ciberseguridad, ha estado trabajando en mejorar su postura en este campo y los ataques cibernéticos son un problema global que afecta a países de todo el mundo.